En el mercado hay diferentes tipos de nata y cada una es para un uso específico. Por eso, cuando alguien pregunta si sirve la nata de montar para cocinar la primera reacción es contestar inmediatamente que no. Pero, ¿no es nata a fin de cuentas? ¿Tan mal podría salir la cosa?
Veamos, la nata de montar tiene una cantidad de materia grasa muy superior a la nata de montar, que debe de ser más untuosa para conseguir la textura adecuada. Cuando se utiliza una nata con mucha materia grasa para cocinar, el plato se va a ver alterado porque resultará más pesado y tendrá un sabor más graso. Por tanto, no es que se vaya a estropear la comida por utilizar nata de montar para cocinar, pero sí que va a tener un gusto distinto e incluso puede verse afectada la presentación.
No es, por tanto, recomendable usar esta nata en la cocina, pero si no hay otra cosa un truco consiste en mezclarla con una pequeña cantidad de leche desnatada. Se consigue así “rebajarla”, logrando que tenga una menor cantidad de grasa en la misma cantidad de nata, pero el sabor se va a ver suavizado del mismo modo y la textura no va a ser idéntica. Sirve, pues, para un apaño en un momento de urgencia, pero no debe de utilizarse este truco de manera habitual porque no merece la pena hacerlo.
Y, ¿podríamos hacer al contrario? ¿Hay algún truco para montar la nata de cocinar? Para que la nata monte correctamente debe de tener un mínimo de un 32% de material grasa y lo ideal es que se acerque al 40%. La nata para cocinar tiene, normalmente, menos de un 20% de materia grasa. Sin embargo, hay quien tiene mucha mano y paciencia y logra montar la nata de cocinar, pero con un truco: añadirle estabilizante. El estabilizante se vende en la sección de productos para repostería, junto con los sobre de levadura, y le da la consistencia que le falta a la nata para que se aguante.
No obstante, hay que tener en cuenta que es fácil que esta nata acabe perdiendo la forma rápidamente y, además, el sabor no va a ser el mismo ya que es mucho más suave la de cocinar. Por tanto, siempre es mejor utilizar cada cosa para lo que es y dejar los trucos solo para emergencias.