Después de estar valorando durante un tiempo el cambio, finalmente me decidí por el cambio de estores a persianas. Sé que son sistemas compatibles, pero preferí quedarme solo con uno de los dos. Con los estores estuve un tiempo y quedé bastante satisfecha pero como habían sido unos estores baratos no es que ofrecieran ese plus de diseño que ahora busco. He cambiado el estilo del salón y ahora quiero algo de más calidad y más personal y, por eso, creo que las persianas alicantinas son la mejor opción.
¿Y qué ventajas ofrecen estas persianas? Para mí lo más importante es la calidez que ofrece la madera. Soy una enamorada de la madera: ojalá pudiera tener toda la casa llena de muebles de madera. El problema, claro está, es que la madera noble es muy cara y sube mucho el precio de los muebles. Incluso en grandes almacenes que presumen de precios ajustados, suele subir bastante el precio. El otro día, sin ir más lejos, vi una mesa grande de madera y cuando revisé el precio casi me da un soponcio. Está claro que la madera para el hogar es un artículo casi de lujo.
Por suerte, otros elementos del hogar son un poco más asequibles pese a usar madera como es el caso de las persianas alicantinas. Pueden ser un poco más caras que unas persianas normales, pero no hay comparación en cuanto al aspecto, especialmente si te gustan los materiales nobles y cálidos. Yo, desde luego, he quedado muy encantada con el cambio. Ahora el salón parece diferente.
Además, esta clase de persianas tienen otra ventaja y es que se pueden adaptar muy bien a diferentes zonas de la casa. Como se puede encargar a medida son un tipo de persianas que van bien con ventanas pequeñas o ventanas más grandes, incluso balcones u otro tipo de estructuras. Y lo sé porque mi salón tiene una estructura un poco particular fruto de una reforma y no es fácil de vestir. Pero con estas persianas he logrado dotar al espacio de esa personalidad y calidez que buscaba.