Muchas cosas están cambiando últimamente. Da la sensación de que las buenas intenciones del pasado se van concretando en hechos. Y aunque aún es muy pronto para valorar, todo indica que vamos por el buen camino para enfocar los problemas relacionados con el medio ambiente desde una perspectiva más ambiciosa. El tiempo corre y hay que actuar, o al menos así lo dicen la mayoría de expertos.
Que las cosas están cambiando lo veo hasta en el día a día. Ya no se trata solo de que te cobren las bolsas de plástico, es mucho más. El otro día en una cafetería se negaron a darme una tapa de plástico para el café. Dije que al ir andando quizás me manchase sin tapa, pero no me dieron tapa. Supongo que ahorraremos en plástico, pero gastaremos más en detergente y electricidad para lavar camisas. Pero al margen de alguna situación un poco absurda también se producen otros curiosos cambios.
Recientemente en un curso que hice en la empresa nos dieron Carpetas y Maletines de carton. Hacía solo un año había hecho un curso similar y nos habían entregado material promocional que incluía una carpeta de plástico. El hecho de utilizar cartón para este tipo de eventos entiendo que puede encarecer el producto, pero también es una apuesta de imagen.
Cualquier persona con un poco de perspicacia entenderá que el hecho de que se usen materiales reciclados y reciclables supone una imagen positiva del producto o de la marca. El otro día vi un anuncio de una bebida clásica que presumía de que el envase tenía un porcentaje de material reciclado. Claro, no decía que el otro porcentaje no era reciclado, pero algo es algo y el consumidor suele ver el vaso medio lleno.
Por eso, me parece muy buena idea ofrecer Carpetas y Maletines de cartón que sustituyan al plástico, aunque eso conlleve un esfuerzo extra. Pero lo bueno, también, es que las firmas de diseño están haciendo cosas alucinantes con estos materiales reciclables. Es un mundo nuevo que se presta a muchas innovaciones.