Cuando se compra una mesa para exterior, tanto en hostelería como por parte de particulares, se miran muchos aspectos de la misma hasta encontrar la que nos convence. El tamaño, la forma, el acomodo que nos ofrece o su resistencia se tienen en cuenta. Especialmente cuando se compra una mesa para la terraza de casa, el precio es importante pero solemos estar dispuestos a pagar un poco más por calidad.
Pero las sillas tienen un punto en contra, hacen falta muchas más que mesas y dado que son muebles con un precio relativamente alto, el presupuesto se dispara. Por eso, muchos buscan sillas baratas que, al final, salen muy caras. En el caso de la hostelería es evidente, ya que sillas que se deforman rápidamente o que rompen con el uso prolongado no solo hacen que haya que volver a gastar rápidamente en otras, sino que también perjudican la imagen del local. Y, en el hogar, si las sillas no aguantan la temporada y se ponen feas, tampoco compensan a medio plazo.
Por tanto, ¿qué debemos de tener en cuenta a la hora de comprarlas? Veamos tres puntos básicos.
-Que sean de calidad. Confiar en las mejores marcas, como ezpeleta sillas es una garantía de éxito. Esta marca, especializada en muebles para exterior tanto de hostelería como para particulares, ofrece productos de altísima calidad a precios muy competitivos dentro de su gama. Las sillas de Ezpeleta son fáciles de combinar tanto con otros muebles de la marca como con cualquier otro mobiliario actual ya que son diseños minimalistas y actuales que siguen las tendencias y que resultan suficientemente neutros para cualquier ambiente que quiera presumir de elegancia y de sofisticación.
-Que sean adecuadas a su fin. Unas sillas para comer pueden ser bajas, recogiendo la zona de los riñones pero sin dar respaldo a toda la espalda. Pero si son sillas para leer y estar relajados toda la tarde, entonces es imprescindible que sean más altas y que recojan bien todo el cuerpo.
En hostelería sucede lo mismo y no es igual una silla para tomar un café que una para una boda, en la que no solo es importante la elegancia, sino el estar cómodos durante horas.
-Que encajen con el resto de muebles. Evidentemente, de poco sirve que las sillas sean ergonómicas y de calidad si no encajan con el resto de los muebles y decoración de la terraza. Por eso, se recomienda que todo sea de la misma línea.