Un Pc industrial a medida es un PC con unas características mejoradas para poder trabajar en entornos particularmente difíciles, como por ejemplo ambientes con una gran humedad, muchas vibraciones o con temperaturas extremas.
El interior del ordenador puede ser exactamente igual que cualquier otro, adaptado siempre a las necesidades de cada cliente, pero el exterior está especialmente cuidado y reforzado para que soporte condiciones que un PC normal no aguantaría.
Aunque están pensados para la industria, este tipo de PC también pueden ser muy útiles en comercios o establecimientos en los que son muchas las personas que manejan este tipo de aparatos y que no siempre van a tener el cuidado necesario con ellos.
Tal vez, no se necesiten algunas de las características más extremas de los PC industriales, pero sí otras como su gran resistencia o sus paneles a prueba de golpes. Evitaremos así que cuando haya muchas personas manejando cajas o materiales por la zona en la que se encuentran estos ordenadores, puedan golpear por accidente la pantalla y romperla.
Un buen ejemplo de lugares en los que puede ser muy acertado contar con este tipo de ordenadores es en tiendas de bricolaje y herramientas en las que constantemente se están moviendo carretillas con materiales de gran tamaño. Los paneles de ordenador reforzados se pueden encontrar en las entradas de los almacenes y también en las cajas de autoservicio a las que acceden los clientes con grandes carros y productos voluminosos, lo que hace más fácil que pueda ocurrir un accidente.
Las tiendas de congelados son otro buen ejemplo, ya que estos paneles pueden situarse en las puertas de las cámaras frigoríficas para que quede registrado todo lo que entra y sale de ellas de modo que el inventario siempre sea absolutamente exacto. Los trabajadores, manejarán las cajas de congelados y también el panel de control del ordenador sin miedo a que el frío o la humedad puedan dañarlo.
Dado que estos productos son muy personalizables y sus precios cada vez son más bajos, a la mayoría de propietarios de establecimientos les compensa instalar este tipo de PC en comercios con condiciones diferentes a las habituales. Estos ordenadores se adaptarán totalmente al tipo de trabajo que se lleva a cabo en su negocio y la diferencia en el precio queda cubierta por la menor incidencia de averías, por lo que además el trabajo será mucho más fluido.